Hoy vengo con la reseña de un libro que me ha encantado de principio a fin.
Me llamaba mucho la atención y cuando lo tuve delante, me duró nada más que una tarde.
Un lunes en el que le parece que nada tiene sentido, conoce a un misterioso chico en la azotea del edificio de la emisora. No sabe su nombre; ni tampoco quién es; pero su llegada cambiará su vida para siempre, o al menos alejará las nubes grises de ese día. Sin embargo, de vuelta a la oficina, la realidad la espera y tiene nombre: Carlos Carballeira, su insoportable, aunque atractivo, jefe. A pesar de que se pasa el día intentado evitarlo, él siempre encuentra la forma de acercase. Irene cree que la odia, pero ¿y si no fuera así?
Pronto descubre dos cosas: Carlos alberga sentimientos por ella y el chico de la azotea oculta una identidad que no esperaba. La chispa que siente por él es tan incontrolable como la que empieza a sentir por su jefe. Confundida, su vida se adentra en una vorágine de sentimientos por ambos de la que no puede escapar. Pronto remará en dos direcciones hacia aguas que la arrastrarán a una pasión que terminará por desbordarla.
Este libro me llamó la atención desde el
primer momento en que empecé a leer cosas sobre él por redes. Sabéis que me
gusta mucho la novela romántica, por lo que sabía que este libro iba a caer sí
o sí.
Irene, nuestra protagonista, trabaja como
correctora en una emisora muy famosa. Un día, agobiada por todo lo que ocurre
en su lugar de trabajo, se escapa a la azotea de su edificio, donde conoce a un
chico misterioso que va a poner su vida cabeza abajo. Pero unas plantas más
abajo, Carlos, su jefe, la espera para hacer que su vida cambie de nuevo.
Lo que más me ha gustado del libro son los personajes. Son muy diferentes
entre sí, y la novela te deja con ganas de conocerlos a todos. Mi favorito, sin
duda, es Marco, por su sensibilidad y su alegría, que contagia tanto a sus
compañeros como a todo el que lee su historia. Carlos es otro personaje que
tiene mucha profundidad, y diría que es el más complejo de todos, lleno de
luces y sombras, escondiendo muchos secretos que se van revelando durante la
novela. Irene me ganó desde la primera página, tan soñadora que te
contagia. Pero todos los personajes, tanto protagonistas como secundarios,
son especiales a su manera. ¡Les he cogido un cariño enorme!
Es una novela sencilla, que consiguió
hacerme desconectar de todo. Me lo pasé muy bien leyéndolo, y disfruté
muchísimo de todo lo que vivieron Irene y compañía.
La verdad es que es una historia que me ha
cautivado de principio a fin y que me bebí en una tarde de lo enganchada que
estaba porque Zahara escribe tan bien que las hojas pasan sin parar y cuando te
das cuenta, el libro se ha terminado. De hecho, la única pega que le pongo
al libro es que no haya sido más largo, porque así podría haber conocido más a
estos personajes que he empezado a querer tanto.
Os lo recomiendo mucho si os apetece una
comedia muy ligera, donde predominan el amor y la amistad, con la música como
elemento fundamental.
¡¡Muchas gracias!!
ResponderEliminarMe alegro un montón de que te haya gustado y de que te hayas llevado una buena impresión de la novela y sus personajes. Carlos es mi personaje favorito jijiji
La verdad es que sí, tienes razón en lo de la longitud, seguramente si la reescribiera tendría muchas páginas más jajaja Pero, en ese momento, la cosa salió así.
Gracias por todo. Un abrazo.
PD: Me encanta la frase que has escogido ^^
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarPues la verdad es que suena muy bien. Cuando mencionaste lo de la ruptura, la compañera de piso animada, la aficción de la prota por la lectura... Me sonó demasiado cliché, no te voy a mentir. Pero a medida que iba leyendo tu reseña, me has ido convenciendo. De momento tengo un par pendientes, pero ya está apuntado en mi lista para poder leerlo cuanto antes. ¡Gracias por la recomendación!
Un abrazo,
María 🍄🌱🌼